Mientras en el fútbol la pandemia del coronavirus ya ha atacado los bolsillos de los jugadores y empleados de clubes como el Barcelona, Atlético de Madrid, Espanyol y Alavés, que han decidido aplicar un ERTE, en el pelotón ciclista la rebajas llegan a equipos World Tour: el Astana y el Lotto-Soudal son los primeros en apretarse el cinturón.
Con multitud de pruebas aplazadas y los patrocinadores nerviosos por una situación de máxima incertidumbre, la salud económica del ciclismo va camino de la UCI, pero de un hospital, y precisamente a la referida a la Federación internacional.
El Astana empezó el año con retrasos en el pago de sus empleados, y una vez solucionado ese asunto ahora los patrones han pedido a los ciclistas que recorten su salarios un 30 por ciento durante los próximos tres meses para paliar los daños que ocasiona el coronavirus.
Primer aviso para el pelotón del World Tour, en cuyo sector ya movió ficha el pasado fin de semana el equipo belga del Lotto-Soudal, donde los 27 corredores de la plantilla acordaron renunciar voluntariamente a una parte de su salario.
La condición expuesta por los ciclistas del Lotto-Soudal es que vuelvan a cobrar las cantidades de sus contratos una vez restablecido el calendario de competición.
Una medida que los ciclistas han tomado «en solidaridad con los empleados y patrocinadores» mientras que la temporada esté paralizada por la crisis mundial del coronavirus.
La escuadra belga tiene a 25 personas, la mayoría del personal de apoyo, incluidos mecánicos, conductores y fisioterapeutas, en situación de desempleo, y sus ingresos dependerán de las ayudas proporcionadas por el Gobierno hasta que se restablezca la normalidad competitiva.
Info: EFE
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