La historia de Miguel Martinez es peculiar como pocas. El pequeño corredor francés (con familia española) fue todo un prodigio en su juventud destacando a nivel mundial desde sub-23 en una época en la que tuvo que medirse a corredores como Cadel Evans, otro joven prodigio del MTB en aquellos años.
Desde finales de los años 90 hasta bien entrado este siglo Miguel Martinez fue una referencia total del XCO. En 1996 ya logró ser 3º en la general de la Copa del Mundo con solo 20 años. El año 2.000 sería el mejor de su carrera deportiva. El año en el que ganó la medalla de oro en XCO en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
Probó en el ciclismo profesional de carretera con el equipo Mapei-Quick Step y con el Phonak, llegando a correr el Tour de Francia. Pero no cuajó. Ahora, a los 44 años, regresará al ciclismo profesional de ruta con el equipo Amore e Vita.
Desde su teórica retirado oficial de la competición hace 12 años Miguel Martinez no ha parado de competir. Equipos exóticos han visto el paso del francés por sus filas, que ha intentado seguir ligado a la competición. Por medio algunos escándalos de índole extra deportiva y algunos resultados destacados, llegando a ser campeón de Francia de bike-maraton.
Por lo que se refiere a su pasado en el ciclismo profesional de carretera, Martinez militó en el Mapei-Quick Step y en el Phonak, siendo su último equipo profesional de carretera el propio conjunto Amore e Vita.
Ahora regresará a ese equipo para volver a competir en carreras profesionales de carretera con 44 años. Lo hará con un contrato de 6 meses que se podría prorrogar en caso que funcione bien por ambas partes.
No es un retorno por dinero, según ha explicado el propio corredor en Francia: «No me pagarán por ello, pero no me importa. La pasión es más importante que el dinero» ha explicado Martinez respecto a su regreso a la competición profesional.
Info: Es MTB
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